Receta de consomé de pollo

Un plato que te ayuda a mantenerte caliente y que, además, te protege de resfriados y otros problemas de salud. Fácil de hacer y con productos económicos. Hablamos de la receta de consomé de pollo y te enseñamos, paso a paso, cómo puedes disfrutarla en casa.

Índice de contenidos

¿Qué es el consomé de pollo?

El consomé de pollo es una preparación culinaria a base de caldo de pollo.

Es apreciado por su sabor suave y reconfortante, y se utiliza en sopas, guisos, salsas y otros platos.

Origen del plato

Su origen no se atribuye a una única cultura o región, ya que sopas y caldos de pollo se han preparado de diferentes formas en todas partes del mundo a lo largo de los siglos.

En Asia, por ejemplo, ha sido un elemento básico en la cocina china, ya que se le ha considerado como un remedio para aliviar los resfriados y mejorar la salud.

En Europa, concretamente en Francia, se desarrolló la técnica de hacer consomé, que se convirtió en un plato refinado y elegante servido en la alta cocina del país.

En América, la versión de consomé de pollo se ha adaptado y evolucionado en las cocinas de América del Norte, Central y del Sur, y se prepara de diversas maneras según las tradiciones culinarias locales.

¿Cuál es la diferencia entre un caldo y un consomé?

La diferencia principal entre un caldo y un consomé radica en su claridad y pureza.

Ambos son líquidos a base de agua en los que se cocinan carnes y verduras para extraer sabores y nutrientes, pero tienen ciertas diferencias:

Claridad: el consomé es un líquido claro y transparente, mientras que el caldo suele ser más turbio y puede contener partículas sólidas, como trozos de carne, verduras y sedimentos.
Filtración: para obtener la claridad característica de un consomé, se filtra después de cocinarlo para eliminar cualquier partícula sólida. En el caso del caldo, no es necesario un proceso de filtración tan riguroso, por lo que es más espeso y puede contener más elementos sólidos.
Uso: el consomé se utiliza como base para sopas refinadas, salsas y otros platos donde la claridad es importante. Por otro lado, el caldo es más versátil y se usa en una variedad de recetas, incluyendo sopas más rústicas, guisos y platos donde una textura más sustanciosa es deseada.
Sabor: el consomé tiende a ser más delicado y suave, ya que se enfoca en extraer sabores sin que otros elementos opaquen su claridad. El caldo puede ser más rico e intenso debido a la presencia de trozos de carne y verduras.

Beneficios del consomé de pollo

A este plato se le atribuyen propiedades reconfortantes cuando se consume caliente, como aliviar los síntomas del resfriado o calentarte.

¿Qué lleva el consomé de pollo?

Se obtiene cocinando en agua trozos de pollo, por norma general con huesos y piel, junto con verduras y especias durante un tiempo suficiente para extraer los sabores y nutrientes de los ingredientes. Luego, se filtra para obtener un líquido claro y sabroso, que se conoce como consomé de pollo.

Ingredientes para hacer 4 litros

1 pollo entero (aproximadamente 1.5 kg)
4 litros de agua
2 zanahorias, peladas y cortadas en trozos grandes
2 ramas de apio, cortadas en trozos grandes
1 cebolla, pelada y cortada en cuartos
2 dientes de ajo, pelados y machacados
1 hoja de laurel
5 granos de pimienta negra
Sal al gusto
Claras de huevo (para clarificar el consomé, opcional)

Elaboración de la receta de consomé de pollo

Lava el pollo y colócalo en una olla grande. Cúbrelo con los 4 litros de agua y lleva a ebullición a fuego medio-alto.
Una vez que el agua comience a hervir, reduce el fuego a bajo para mantener un hervor suave. Agrega las zanahorias, el apio, la cebolla, el ajo, la hoja de laurel, los granos de pimienta y sal al gusto.
Cocina el caldo a fuego lento durante 1.5 – 2 horas. A medida que se haga, se formará espuma en la superficie. Retírala con una cuchara para mantener el caldo claro.
Cuando esté bien cocido y todas las verduras estén tiernas, retira el pollo y las verduras de la olla. Puedes usar el pollo desmenuzado y las verduras para otros platos.
Opcional: Para obtener un consomé más claro, puedes clarificarlo usando claras de huevo. Para hacerlo, bate las claras de huevo y mézclalas con un poco de caldo caliente. Luego, vierte esta mezcla en la cazuela y revuelve suavemente. Lleva el caldo a hervir durante unos minutos y luego retira la espuma formada. Filtra el caldo a través de un colador o un paño de cocina limpio para obtener un líquido claro.
Ajusta la sal.

Sirve el consomé caliente y disfruta. Puedes servirlo solo o con trozos de pollo, verduras o fideos, según tus preferencias.

Y si prefieres probar el caldo de pollo, aquí te dejamos la receta.